Mientras los portátiles van desbancando a los ordenadores de sobremesa, y se popularizan los discos duros externos, no sólo aumenta la movilidad, sino también el riesgo de caídas y golpes y por tanto, la pérdida de los datos. Y es que éstos sean probablemente los motivos principales por los que las averías en cabezales y bobinas ocupen por primera vez el primer puesto (28,57%) en Cataluña en pérdidas de datos, según el informe que elabora anualmente Recovery Labs.
Los fallos por descompensación térmica, debidos principalmente a cambios bruscos de temperatura, han pasado a un segundo lugar (21,09%), quizá gracias a la labor de concienciación que lleva haciendo la compañía estos últimos años para que se mantengan los equipos en lugares acondicionados y evitar así las pérdidas de datos.
Por regiones, la que más ha sufrido pérdidas ha sido Barcelona un año más, con casi un 87% de la demanda.