Recupera tus archivos perdidos

Recupera tus archivos perdidos

Abril 2010 - PCActual

Análisis de Laboratorio

Entre los mayores temores de los usuarios de PC se encuentra el de perder su información irremediablemente. Sin embargo, existen diversas soluciones de emergencia para procurar enmendar tal desastre.

Vivimos en la época de la información, la evolución de los dispositivos de almacenamiento nos ha permitido disponer de equipos capaces de hacer acopio de casi cualquier cosa y en grandes cantidades: fotos, trabajos, cartas, libros, vídeos… Todos ellos dependen de un medio que no está exento de riesgos, por errores humanos, fallos técnicos, virus...

La solución ideal pasa por hacer copias de seguridad regulares de nuestros datos, pero solemos posponerlo hasta que es demasiado tarde; además, la Ley de Murphy dicta que perderemos los archivos más nuevos, aquellos de los que no disponemos de una copia. Llegados a este punto, no todo está perdido, las herramientas de recuperación de datos son capaces de analizar nuestro disco duro en buscaa de datos que han sido eliminados y de rescatar una gran cantidad de ellos. Pero, no es oro todo lo que reluce, una vez hemos borrado los archivos el tiempo corre en nuestra contra; es bastante factible recuperar un archivo que acabamos de eliminar, aunque difícilmente podremos salvar los que destruimos meses atrás.

¿Cómo es posible?

Comprender cuál es el principio en el que se basan estas aplicaciones puede servirnos para no cometer errores y aumentar las posibilidades de éxito en nuestra misión. Cuando borramos un archivo, en realidad, el sistema operativo lo que hace es marcar ese espacio como vacío, pero la información sigue ahí. El conjunto de bits permanece inalterado, esperando que llegue nueva información que lo sustituya.

Lo que hacen básicamente los programas de recuperación es buscar esas zonas del disco y obtener la información. Los problemas comienzan cuando nosotros escribimos nuevos datos en el disco, que sustituyen el anterior contenido de estos bits remanentes, cuanto más hayamos escrito en disco, menos posibilidades tendremos de salvar nuestra preciada información, o solo podremos recuperarla parcialmente (dependiendo del tipo de archivos, puede ser suficiente).

He extraviado un archivo

Mantengamos la calma, si el archivo ha sido borrado de forma accidental recientemente, tenemos posibilidades de recuperarlo. Lo primero que debemos hacer es obtener una de las herramientas disponibles a tal fin, la cual deberemos instalar en una unidad o partición diferente a la partición afectada, debido a las razones que hemos visto anteriormente.En caso de que esto no sea posible, la alternativa pasa por ejecutarla desde un disco USB. El siguiente paso será escanear nuestra unidad, la herramienta nos mostrará los archivos encontrados y el estado de integridad en que se encuentran.Una vez localizados, el último paso será recuperarlos, esto se debe hacer también siempre en una unidad diferente, sería una lástima que estando tan cerca de la solución sobrescribiéramos sus datos.

A grandes males, grandes remedios

Aunque los programas analizados en esta comparativa pueden sacarnos de un aprieto si hemos borrado unos ficheros por error, en el caso de una catástrofe mayor, como que el disco se ha mojado, golpeado o incluso quemado, la solución adecuada pasa por dirigirnos a una empresa especializada en recuperación de datos, las cuales disponen de expertos, cámaras limpias y técnicas avanzadas que nosotros no tenemos en nuestro hogar. Puede parecer mentira, pero por muy graves que parezcan los daños infligidos al disco, existe alguna posibilidad de salvar un porcentaje de su contenido. Algunas de las empresas propietarias de las herramientas de la comparativa nos ofrecen también este tipo de servicios avanzados, como es el caso de Recovery labs (www.recoverylabs.com).

Por supuesto, esta es una solución más cara y tampoco resulta infalible, aunque algunas empresas no nos cobrarán si no consiguen recuperar los datos con éxito. Si hemos perdido documentos que representan largas horas de trabajo o son irreemplazables, deberemos preguntarnos: ¿Cuánto vale realmente nuestra información?

Un arma de doble filo

A poco que miremos más allá, no es difícil ver las implicaciones que este tipo de desarrollos conlleva en caso de ser usados por una persona con fines maliciosos, los datos confidenciales que creíamos inaccesibles, podrían ser recuperados y ponernos en un gran aprieto. La solución pasa por llevar a cabo un borrado seguro de toda aquella información que deseemos eliminar. Algunos de los programas analizados como Recuva o Restoration incluyen esta funcionalidad, pero también podemos acudir a aplicaciones especializadas en estas labores, como Smart Data Scrubber (www.smartpctools.com/es/data_scrubber/index.html).